viernes, 10 de enero de 2014

Autoestima Laboral

Muchas personas se preguntan si la autoestima es la consecuencia de nuestros buenos resultados o si nuestros buenos resultados se producen (en parte) por nuestra autoestima. En otras palabras, qué es primero, quererse a sí mismo para obtener la autoconfianza que nos conduce a buenos resultados, o buscar buenos resultados para mejorar nuestra evaluación que hacemos de nosotros mismos y con ello, querernos más. 

En el mundo laboral actual el ser humano está expuesto a condiciones cambiantes, presiones, retos, conflictos y muchas otras situaciones que encierran un factor bastante influyente sobre la autoestima del mismo y donde a su vez el carácter y la personalidad del individuo condicionan los logros y fallas que inciden en los resultados esperados en cualquier empresa o negocio, de allí la importancia de estudiar este componente de la personalidad del individuo.


Para favorecer el desarrollo de una buena autoestima se puede contribuir al facilitar alternativas con objetivos acordes a las capacidades y nivel de desempeño de los trabajadores. Esto significa que para contribuir positivamente en la autoestima de los trabajadores es necesario ver que las exigencias y metas que se les demandan sean acordes a sus aptitudes y capacidades para no someterlos a trabajos donde su rendimiento sea negativo por falta de preparación y no de capacidad, en todo caso si la persona se siente apta para aprender algo nuevo la empresa puede fortalecer esa actitud mediante capacitaciones que mejoren su rendimiento.

Cuando una persona obtiene su empleo se siente motivada por el hecho de haber sido elegida como apta para desarrollar la tarea que requiere el puesto al que aspiró y ha sido asignado; sin embargo este sentido puede cambiar de acuerdo a los estímulos que del entorno laboral reciba el trabajador y de qué tan sólidas son las bases de la autoestima que posee.

Si alguien es constantemente avergonzado en su puesto de trabajo, sobre todo frente a todos sus demás compañeros, sin reconocer nunca los logros alcanzados se desarrollará una actitud negativa hacia el trabajo y la empresa, que hacen que en lugar de sentirse parte de la razón de ser de la misma se sienta excluida de ella con lo que cada día se sienta con menor valor por estar en un lugar donde no puede desarrollar su potencial y esto afectará su rendimiento negativamente.

En lugares como plantas de producción los trabajadores además de estar influenciados por factores del ambiente que los hacen adaptarse o no más fácilmente a sus tareas, están sometidos a presiones de llegar a producir una meta determinada y condicionados a no cometer errores; cuando uno de estos ocurre y el supervisor lo descubre debe guiar al trabajador para hacerle ver que él es capaz de corregirlo y de hacer una producción con cero defectos, pero si se le reprende a gritos y con ofensas se sentirá con falta de confianza en si mismo que le ocasionará inconscientemente seguir cometiendo los mismos errores y que lo harán perder confianza en sus capacidades, actuando por temor u obligación y disminuyendo su autoestima. Esto se traduce no sólo en áreas de producción de bienes sino también para áreas administrativas donde se planea mucho el futuro de las organizaciones.

Enfocado al trabajo, se nota que una persona que está en un ambiente laboral armonioso y con condiciones adecuadas para su trabajo se le ve más dispuesto, conforme con su trabajo y lo hace sentirse valorado; mientras quien debe trabajar en un ambiente descuidado, en malas condiciones y con un régimen represivo se observa insatisfecho, tiene problemas para concentrarse y aumenta los errores, su autoestima es disminuida por no sentirse valorado ni tomado en cuenta.